El Duelo es el proceso de recuperación emocional ante cualquier pérdida. Para muchos de nosotros el año 2020 fue y será recordado como un año de pérdidas y cuando hablo de pérdidas, no me refiero únicamente a pérdidas de vidas humanas, sino a pérdidas de relaciones, pareja, trabajo, bienes etc.
- Cada pérdida trae un cambio, tanto para quien lo sufre directamente como para quien rodea a la persona que la resintió.
- Cada pérdida siempre lleva implícito un duelo; el duelo es vital en la adaptación de la persona en su nuevo ambiente.
Si nos enfocamos en que somos energía, que todo lo que existe en el universo es energía y que la energía de cada uno de nosotros influye en todo lo que nos sucede, entonces podemos ser conscientes que al momento de irse la energía que estaba cerca de nosotros, lo resentimos. Si absorbemos o damos nuestra energía, necesitamos adaptarnos al nuevo ambiente ante esa pérdida. (Tanto si la energía era positiva o era una energía negativa).
Reconocer el origen del dolor y la no resistencia a sentir, sino a aceptar lo que se siente, hará que el duelo sea más corto. Si requieres llorar, llora. Si requieres gritar, grita. Si requieres correr, corre. Si requieres agradecer, agradece. En pocas palabras, evita reprimir lo que sientes.
La adaptación a un nuevo campo energético, requiere tiempo.
Mi primer pérdida consciente la tuve hace aproximadamente 6 años. La relación de pareja y por tanto la energía que yo compartía con mi ex pareja se perdió. En qué momento pasó? No estoy segura, pero, un día, tuvimos (mi ex pareja y yo) que haber hecho alguna elección (tal vez basada en ciertos programas inconscientes) que detonó en un cambio de energía. (Nuevas ideas, nuevas formas de pensar, nuevas amigas o amigos etc).
Mi duelo lo viví dentro del matrimonio, ahora entiendo el porque lloraba tanto, el porque de mi enojo, el porque de mis cambios drásticos de humor. Me estaba adaptando a un nuevo ambiente, a nuevas energías.
Mi siguiente gran pérdida ocurrió hace un año, falleció mi papá, una pérdida diferente, pero igual de dolorosa. Mi duelo, lo viví completamente diferente, ahora 6 años después de mi primer perdida, contaba ya con otras herramientas con las que pude recuperarme mucho mas rápido, viendo la muerte como algo diferente y siempre desde el agradecimiento de lo vivido con el.
¿Lo has visto? Como cuando pierdes algo, pronto llega algo o alguien más que trata de llenar ese vacío energético?
¿Cuántas veces te ha pasado?
Cuando unos se van, otros llegan. Es claro que cada uno de nosotros atraemos y resonamos con esa energía que necesitamos.
Ahora, es muy importante que te preguntes, ¿Cómo quiero sentirme? ¿Qué energías requiero en mi vida para sentirme como me quiero sentir?
Estamos en constante cambio, y hasta que no logres identificar qué factores (energías) están contribuyendo o no a tu felicidad, todo puede resultar difícil.
- Fuerte para los cambios.
- Fuerte ante cualquier perdida!!
- Fuerte para el Duelo!
Por Ana María de la Peña Flores.
Founder & Instructor.